Inhumano. En sector de Buenos Aires, inescrupulosos sacrificaban animales en condiciones insalubres para lucrar con la carne. Matadero informal sigue operando aunque ya fue intervenido hace dos años. No se encontró a los propietarios.
Elizabeth Huanca.
Arequipa.
Arequipa.
El hallazgo de una yegua moribunda al borde de la torrentera que atraviesa el Comité 8 en el sector de Buenos Aires (Cayma) puso al descubierto la existencia de un camal informal donde se sacrifican equinos y burros de forma inescrupulosa.
El animal yacía en el suelo sin poder levantarse. Algunos vecinos de la zona conmovidos por la escena solo atinaban a echarle agua y darle verduras para mantenerlo con vida. Según algunos testigos, fue abandonado en el lugar la noche del lunes.
La yegua llegó al lugar en un camión junto a otros animales. Provendrían de diversos puntos de la región. Serían sacrificados 200 metros más allá, en la margen derecha de la torrentera, donde opera desde hace dos años un matadero informal. Todo hace suponer que el animal fue maltratado por los propietarios del camal para forzarlo a caminar. No lo lograron y lo dejaron allí.
Alertados por los lugareños, representantes de la comuna de Cayma, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y la Fiscalía de Prevención del Delito se apersonaron hasta la zona para retirar al animal. Este será sacrificado si su diagnóstico es negativo, según explicó Walter Díaz, especialista del Senasa.
CAMAL INFORMAL
Al ver a las autoridades, los vecinos denunciaron a Gregorio Pérez, quien sería propietario del matadero. Dijeron que él, junto a su familia, se dedican a sacrificar caballos, burros e incluso canes para comercializar indebidamente su carne.
En efecto, al acudir al lugar señalado, se halló el supuesto camal. Allí 18 animales divididos en dos corrales, se encontraban en deplorables condiciones, en medio de un olor nauseabundo, rodeados de moscas, y sin agua ni comida.
En el precario local además se observó un cuarto donde había vísceras. También se hallaron huesos, además de un cráneo, incinerados. Sin embargo, no se encontró a ningún dueño, por lo que no se pudo intervenir.
La fiscal Ana Cecilia Cordero dejó constancia del hallazgo y dispuso la apertura de un proceso de investigación. Representantes de la comuna de Cayma dijeron que hace dos años este mismo lugar fue intervenido.
“Se halló lo mismo. Se les abrió un proceso sancionador por sacrificar animales sin autorización”, dijeron. Sin embargo ese proceso quedó en nada.
No obstante, se comprometieron a vigilar el lugar para abordar a los dueños, empero señalaron que por ahora no pueden salvar a los animales cautivos.
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