Alejandro Aguinaga, ex parlamentario de la facción "albertista", considerado además parte del fujimorismo duro, es sobre todo amigo y médico personal del expresidente.
Hace dos días acompañó a Fujimori a una clínica, en otro de los traslados de emergencia desde la prisión de Ate, mientras en el centro de Lima miles de opositores marchaban para manifestar su oposición a un eventual indulto.
En el programa Semana Política, de canal N, el médico de Fujimori fue preguntado si el ex presidente tenía una enfermedad terminal. "No tiene enfermedad terminal", admitió.
A continuación abandonó su condición de médico y asumió el de político. "La ministra de Justicia pretende que una resolución ministerial se anteponga a la Constitución", dice para cuestionar a Marisol Pérez Tello quien señala que Fujimori no cumple con las condiciones para el indulto.
En opinión de Aguinaga, la Constitución no establece el requisito de la enfermedad terminal sino el concepto de enfermedad grave como fundamento para la decisión presidencial.
En ese camino, dice que el expresidente tiene enfermedad grave.
"Enfermedad grave, seis intervenciones por cáncer a la lengua, tiene 79 años. Acaba de tener un episodio gravísimo que ha podido acabar con su vida: Taquicardia supraventicular, un corazón que entraba a un ritmo de galope en los primeros tratamientos, no respondía. Hace dos días, otra crisis hipertensiva con arritmia cardíaca. Estamos en una situación seria. Yo abrigo la esperanza que PPK lo indulte", argumenta.
Observadores comentan que es preciso conocer la opinión profesional de una junta médica independiente y técnica que haga un diagnóstico científico en el caso que el Ejecutivo decida ir por ese camino.
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