Un joven ingeniero español que visitaba Lamas por turismo, al enterarse de la tragedia en el distrito de Sauce, se constituyó a Nuevo Porvenir, para ponerse a disposición de los brigadistas que vienen buscando los cuerpos que continúan desaparecidos.Daniel Martínez Quintanilla, desde el sábado 20 convive con los moradores de la zona, con el poco dinero que tenia en ese momento, compró globos para compartir con los niños, que la gran mayoría se quedaron huérfanos.
“En estos días pensé enseñar algo a los moradores, sin embargo son ellos quienes me están enseñando muchas cosas, voy a continuar el tiempo que sea necesario, porque hay niños que necesitan que se quedaron sin padres” señaló Martínez Quintanilla.
Los pocos niños que quedan en esa comunidad, todos los días practican deporte, para olvidar la tragedia, los damnificados continúan viviendo en las carpas que instaló el Instituto Nacional de Defensa Civil.
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