LIMA -
Por estar implicado en la venta ilegal de armas y municiones a prontuariados delincuentes del Callao, fue intervenido ayer un agente de la Policía Nacional del Perú.
El suboficial técnico de segunda Samuel Elías Quispe Solórzano (48) había acordado encontrarse con un delincuente chalaco llamado Henry Jerson Rivera Ficcher (29), "Cuarto Pollo", para negociar la venta de tres granadas de guerra tipo piña al precio de 500 soles, así como de armamentos y municiones, según revela el parte policial.
El efectivo fue intervenido en su día de franco cuando se desplazaba en su vehículo por el cruce de la avenida Buenos Aires y Jirón Arica, en el Primer Puerto.
Al momento de la intervención del suboficial, huyó un sujeto aún no identificado, de aproximadamente 25 años.
Agentes policiales a cargo de las investigaciones vienen interrogando a sus colegas de la comisaría Ciudad y Campo, en el Rímac, para confirmar o descartar si hay otros efectivos implicados en esta mafia de venta de armas y municiones a delincuentes de bandas organizadas del Callao y otras regiones.
Durante el interrogatorio, el suboficial sufrió una baja de presión, por lo que una unidad de los bomberos llegó para darle los primeros auxilios y luego fue trasladado al hospital Daniel Alcides Carrión, bajo custodia policial.
Quispe podría ser denunciado por los delitos contra la seguridad pública, peligro común, tenencia ilegal de armas, municiones y explosivos (granadas de guerra) en agravio del Estado peruano.
GRAN NEGOCIO.. Dentro del vehículo del policía se halló tres gorros de suboficial, un catálogo de armas, un maletín color negro y dos cachas de armas con su respectivo estuche.
"Todo es materia de investigación. Los artículos encontrados en el carro del colega servirán para esclarecer las investigaciones y llegar a dar con todos los involucrados", señaló un agente policial.
Los peritos evaluarán el material incautado para determinar si este proviene de la institución policial y ha sido extraído por malos policías o ha sido obtenido en mercados ilegales.
Los agentes que investigan el caso obtuvieron información de que un día antes de su captura, Quispe, quien vestía su uniforme policial durante la intervención, pese a que era su día de franco, entregó armas y municiones a los delincuentes Edson Giancarlo Rodríguez Carrión, "Perrón", y a un sujeto conocido como "Edwin Castillo".
Según los efectivos de la Divincri Callao, en aquella ocasión su colega había entregado una bolsa conteniendo municiones para armas de fuego. No habría sido la primera vez que hacía estas entregas.
Samuel Elías Quispe Solórzano no era un policía intachable, pues ya tenía antecedentes de mala conducta en la institución policial. El año 2012 figuró en la relación del personal de la Policía que estaba inhabilitado para el otorgamiento del bono de desempeño que se brinda a las dependencias policiales, como la comisaría Ciudad y Campo del Rímac, donde laboraba.
Fue descalificado para recibir este reconocimiento por registrar más de 20 días de sanción de arresto simple durante el período evaluado, según consta en la relación difundida por la página web de la Policía Nacional del Perú.
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