Tanzania ha sido objeto de críticas y acusaciones en lo que respecta a la pandemia del coronavirus, pues, ha manejado la situación de una manera confusa y preocupante ya que su presidente, John Magufuli, se ha negado a adquirir las vacunas y a imponer medidas de bioseguridad.
Luego de varios meses de ocultar información sobre el estado del país por el covid-19, varios ex-funcionarios del gobierno han muerto, y las personas han empezado a sacar sus propias conclusiones, señalando al virus como principal sospechoso.
Cuando se reconocieron e hicieron públicos algunos casos positivos, el mandatario de más alto rango le pidió a los habitantes de la nación tomas medidas y prevenciones, pero con poco esfuerzo e hincapié.No obstante, llamó a los más de 60 millones de tanzanos a tres días de oración, para «derrotar las enfermedades respiratorias».
«Quizás hemos hecho daño a Dios en alguna parte», comentó Magufuli en el funeral de John Kijazi, su secretario en jefe. «Arrepintámonos todos».
Evidentemente, los casos de infectados aumentaban, pero en vez de imponer medidas estrictas como naciones vecinas y colegas, el presidente de Tanzania declaró que el país había vencido al covid gracias a los días de oración.Tedros Adhanom, director general de la OMS (Organización Mundial de la Salud), frente a esto, catalogó de «preocupante» la situación de Tanzania, y pidió a sus ciudadanos apegarse a las recomendaciones sanitarias.
Sin embargo, Magufuli ha continuado afirmando que el país derrotó a la pandemia con la ayuda de Dios.
El gobierno tanzano lleva meses sin actualizar sus números y estadísticas de casos, muertes y recuerdos del coronavirus; del mismo modo se ha negado a comprar vacunasy en su lugar, promueve medicamentos naturales de los cuales no se conoce mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario