Una reciente jornada de fe en Nueva York impactó a toda la ciudad cuando 46 personas fueron bautizadas públicamente en la calle 24 de Midtown Manhattan. El evento fue promovido por la Movement Church, que instaló una piscina improvisada en medio de una de las ciudades más emblemáticas del mundo, marcando un poderoso testimonio cristiano a cielo abierto.El día 29 de junio, decenas de creyentes y nuevos convertidos se reunieron para celebrar el bautismo y la transformación de vidas bajo la misión de cumplir la Gran Comisión de Jesucristo. La ceremonia fue acompañada de alabanzas, oración y la predicación del Evangelio, atrayendo la mirada de peatones y vecinos.Según compartió Movement Church en sus redes sociales, cada bautismo fue una declaración valiente de fe y entrega a Jesús, reflejando el poder de Dios para cambiar corazones en pleno corazón urbano. La iglesia expresó: “Toda la gloria a Dios. Jesús está vivo. Él todavía transforma vidas”.
Entre los testimonios, una joven afirmó: “Dar al Señor mi ‘sí’ fue la mejor decisión que ya tomé, y estoy emocionada de ver cómo otros experimentan el gozo y la presencia del Espíritu Santo”. Otra mujer enfatizó la urgencia de predicar fuera de los templos: “Los cristianos deben salir de sus iglesias, el mundo está perdido porque la Iglesia dejó de buscar almas. Hay que predicar con audacia y sin miedo”.
El evento fue más que simbólico; representó un llamado a la iglesia a salir de su zona de confort, inspirando a otros creyentes a compartir el Evangelio en las calles y llevar el mensaje de esperanza donde la gente realmente lo necesita.Estos bautismos no son un caso aislado: en 2023, cientos de cristianos se reunieron en Times Square para adorar a Dios públicamente. Durante esa reunión, personas recibieron sanidad, liberación y otras entregaron su vida a Cristo. Pastores como Mike Signorelli y Greg Locke lideraron oraciones y ministraciones en el emblemático lugar.
Entre los testimonios más notorios sobresale el de Jenny Weaver, ex-bruja convertida, quien contó cómo fue rescatada del vicio y la desesperanza: “Jesús me hizo hija del Rey. Ya no temo al mañana porque tengo esperanza en Dios”.Church Movement y otras iglesias destacadas han insistido en la importancia de la presencia cristiana en las calles, para llevar consuelo y transformar realidades difíciles con el poder del Evangelio. El bautismo público ha sido una poderosa herramienta de testimonio y unidad entre creyentes, provocando alegría, restauración y reconciliación.
El éxito de la jornada fue de profunda gratitud a Dios y un renovado compromiso de los presentes para seguir evangelizando, con la convicción de que Jesús sigue transformando vidas hoy, tanto en una gran metrópoli como en cualquier rincón del mundo. Este resultado nos deja algo en claro: cuando la iglesia sale a las calles, el mundo ve a Cristo obrando con poder. radioemanuel@hotmail.com